dimarts, 9 de setembre del 2008

DETENIDO EL MONSTRUO POLACO

Un polaco de 45 años fue puesto este lunes a disposición judicial, acusado de haber mantenido durante los últimos seis años a su hija encerrada en un cuarto de la casa familiar, donde la violó en repetidas ocasiones. De esta relación incestuosa nacieron dos niños que el padre obligó a dar en adopción.

La joven tiene en la actualidad 21 años
Las autoridades tuvieron conocimiento de los hechos tras las
denuncias de la propia hija, que hoy tiene 21 años, y su madre, la esposa del detenido, que decidieron revelar a los agentes el infierno que se vivía en su casa de Grodziska, una aldea al este de Polonia, según informó el portavoz de la comandancia central de policía, Mariusz Sokolowski.
El calvario de la joven polaca comenzó cuando apenas era una chiquilla de 15 años y su padre la encerró en un cuarto de la casa familiar, del que era imposible escapar, según el relato de la Policía.
En ese momento, atendiendo a las primeras investigaciones, el hombre comenzó a violar a su propia hija, de las que finalmente nacieron dos niños, uno en 2005 y otro en 2007, que fueron dados en adopción por orden del propio padre y contra la voluntad de su madre.

Parió en un hospital
Según explicó Sokolowski en una entrevista en la cadena de televisión TVN 24, la joven pudo salir en algunas ocasiones de esta cautiverio, en concreto cuando fue a dar a luz a un hospital público a sus dos pequeños, aunque siempre bajo la estrecha vigilancia de su padre y torturador. Se buscará a los niños para hacerles un test de paternidad. Todavía es una incógnita por qué la hija no acudió antes a la Policía y las razones por las que la madre no decidió denunciar los hechos, ya que tenía conocimiento del horror que se producía en su propia casa. Mientras, los agentes iniciaron hoy la búsqueda de los dos hijos dados en adopción, a los que se le realizará un test de paternidad. Por ahora, el hombre permanecerá detenido al menos tres meses mientras se llevan a cabo las investigaciones, según informó el portavoz policial.

Este dramático caso recuerda a lo sucedido hace meses en Austria, donde el electricista jubilado Josef Fritlz mantuvo secuestrada 24 años en un sótano a su hija, en un cautiverio durante el que nacieron siete hijos fruto de la forzada relación incestuosa.