dissabte, 6 de setembre del 2008

EL REY DE LA MONTAÑA (2007)

Quím conduce por unas estrechas carreteras en busca de su exnovia con la intención de recuperarla. Tras varios cruces, Quím se equivoca y se pierde. Ha entrado en una zona laberíntica de caminos cortados y carreteras que vuelven sobre sí mismas. El agobiante paisaje y la ausencia de cobertura hacen que Quím quede atrapado. Buscando una salida, ve una silueta encima de una colina. Quím cree que ha encontrado ayuda, pero, de pronto, la silueta le dispara con un rifle. Confundido, Quím se aleja de allí a toda velocidad. Llega hasta un cruce y se baja del coche, nervioso, buscando ayuda. Una nueva silueta se acerca a lo lejos. Antes de que se dé cuenta, la silueta le dispara en la pierna. Lo que parecía un error se convierte en algo terrorífico: alguien quiere matarle y no sabe por qué. Herido y desorientado, Quím se encuentra con Bea. Ella también está perdida y su coche se ha quedado sin gasolina. Pese a las desconfianzas mutuas, ambos deben unirse para intentar salir de allí. Quím y Bea consiguen la ayuda de una pareja de guardias civiles, pero las inquietantes siluetas les acosan cada vez más. Quím y Bea tienen que huir por el bosque a pie, desarmados, con frío, perdidos. Y sin dejar de ser acechados ni un solo segundo. Si paran, mueren...